5 datos a considerar para prevenir enfermedades en mujeres

octubre 28, 2022

Los padecimientos que afectan la salud de la mujer ocasionan un impacto importante en su esfera biológica, psicológica y social, por lo que se debe procurar tomar ciertas medidas generales para la prevención de enfermedades.

La salud de la mujer se puede ver impactada por la diabetes mellitus, la hipertensión arterial sistémica, el síndrome metabólico, los infartos y los trastornos mentales. Además, las enfermedades ginecológicas más frecuentes, que afectan a los órganos sexuales femeninos, deben ser atendidas oportunamente por un especialista, quien determinará cuál es el tratamiento a seguir para evitar complicaciones.

Durante su vida, la mujer padecerá al menos algún tipo de molestia relacionada con algunos de estos padecimientos.

Enfermedades ginecológicas frecuentes

Padecimientos femeninos más comunes que podemos enlistar:

· Síndrome premenstrual (SPM)
· Dismenorrea
· Dolor de la pelvis
· Endometriosis
· Quistes de ovario
· Síndrome de ovario poliquístico
· Miomas
· Infección por el virus del papiloma humano (VPH)
· Enfermedades o complicaciones durante el embarazo

Los especialistas en ginecología recomiendan acudir a una revisión preventiva de salud de la mujer de forma anual luego de comenzar su vida sexual.

Estas revisiones son de gran importancia, ya que por medio de ellas el especialista en ginecología podrá detectar las enfermedades mencionadas de manera oportuna e indicar el tratamiento más adecuado, según cada caso en particular.

Dentro de las dolencias que afectan la salud femenina, explicaremos algunas de las enfermedades ginecológicas más frecuentes.

Síndrome premenstrual (SPM)

Es la combinación de molestias físicas y emocionales que alteran la vida cotidiana de la mujer durante la llamada fase lútea o 2ª fase del ciclo menstrual, que es el lapso que transcurre entre la ovulación y la menstruación. Este síndrome desaparece durante la menstruación o al concluir esta.

El SPM afecta entre el 30 y 40% de las mujeres en edad reproductiva y entre el 20 y 35% de las mujeres premenopáusicas.

Endometriosis

Se presenta cuando el tejido que reviste el útero (endometrio) crece fuera de este y se convierte en tumores que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque habitualmente se ubican en la cavidad pélvica.

La endometriosis es una enfermedad crónica que puede ser causa de infertilidad en la mujer. Las autoridades de salud consideran que puede padecerla entre el 15% y el 20% de las mujeres entre 25 y 44 años de edad.

Aunque no es un padecimiento curable, existen tratamientos que mejoran mucho la calidad de vida de las pacientes.

Síndrome de ovario poliquístico (SOP)

Se debe a un desequilibrio hormonal, el cual ocasiona que el ciclo menstrual se modifique y el organismo genere quistes en el ovario, lo que a su vez da lugar a problemas para poder embarazarse.

Se estima que entre el 5% y 10% de las mujeres en edad reproductiva presenta Síndrome de ovario poliquístico.

El tratamiento para el SOP varía según cada caso en particular, pero bajar de peso y el ejercicio frecuente son recomendables en las mujeres que lo padecen.

Dismenorrea

Se trata de un dolor que inicia previo o al comenzar la menstruación y se localiza en la zona púbica. Afecta al 50% de las mujeres que menstrúan y es la molestia más común en adolescentes y mujeres jóvenes.

Aunque el dolor por dismenorrea es generalmente de intensidad leve, puede llegar a ser tan intenso que incapacite para realizar las actividades cotidianas cada vez que se presenta.

Complicaciones o enfermedades durante el embarazo

Todo embarazo representa un riesgo para la salud femenina, ya sea por problemas que se tengan antes de embarazarse o alguna enfermedad que se pueda presentar durante esta etapa.

Algunos problemas de salud comunes que pueden complicar el embarazo son: hipertensión arterial, síndrome de ovario poliquístico, problemas renales, enfermedades autoinmunes, enfermedades de la tiroides, VIH, obesidad e infecciones, entre otras que pueden incrementar el riesgo para la madre y el bebé.

Por medio de un buen cuidado prenatal y revisiones preventivas se puede ayudar a detectarlas y tratarlas.
En conclusión, una vez que inicia la vida sexual se debe acudir al ginecólogo al menos una vez al año para poder detectar a tiempo cualquier problema en la salud de la mujer y así prevenir complicaciones.