Visualiza Chímal cambio generacional positivo en el triatlón mexicano
Fernando Hernández. Xalapa. Es el cuatro de agosto del 2020 en el Centro Marítimo de Odaiba. El triatlón de los Juegos Olímpicos concluyó. Los mexicanos actuaron de acuerdo a sus posibilidades. A la distancia una figura que aparece poco en las fotografías y en los videos, pero que ha sido un pilar para el crecimiento mexicano de la disciplina en los recientes tres ciclos, Eugenio Adrián Chímal Domínguez.
En el plano imaginario, el entrenador de la Selección Mexicana de esta disciplina visualizó un escenario histórico en Tokio, aunque está consciente que la historia de los Crisantos Grajales y las Claudias Rivas, en este tipo de eventos, podría llegar a su fin en tierras niponas.
La camada se renovará. La Federación Mexicana de Triatlón trabaja en busca de los hombres y mujeres que tomen la estafeta.
“Estamos trabajando con un proyecto encauzado a esas generaciones de talentos, con todas nuestra base de atletas desde hace 10 años y los hay a montones, tenemos a 20 o 30 súper talentos pensando en 2024 y 2028.
“Estamos trabajando en tres zonas en el país, a marchas forzadas porque el dinero no alcanza para todo, pero con la Federación estamos haciendo malabares para que se pueda hacer”, señaló el veracruzano.
La misión posterior a Tokio es aspirar a lugares más importantes que los obtenidos hasta ahora, que fue un noveno de Claudia Rivas y un duodécimo de Crisanto Grajales, con una participación histórica de cinco aztecas en Río 2016, pero con el afán de que el próximo año se logre el Mérito Olímpico, el documento que los avale entre los ocho mejores de la justa, ya sea a ellos dos u otros mexicanos que vean esa puerta.
Y es que no se puede descartar que aparezcan elementos como Rodrigo González, Irving Pérez, Lizbeth Rueda o, Cecilia Pérez, que ya han mostrado su valía en competencias internacionales.
“Los Juegos Olímpicos no son para todos los atletas, son para pocos, son para aquéllos que los desean, con cualidades físicas, que tienen el apoyo de sus padres, familiares, amigos, de sus estados y Asociaciones”, acotó Eugenio Chímal.
Y bajo ese contexto han logrado detectar a jóvenes que pueden llenar esos requisitos, con un importante número de jaliscienses en el grupo, pero también de Durango, Zacatecas, Ciudad de México y Veracruz como entidades base, pero aseguró que hay mucho talento en el país, aunque recalcó que no es lo más adecuado trabajar en la capital del país por sus condiciones y será importante que los deportistas busquen sus centros de entrenamiento más acordes a la práctica de la disciplina.
“Ya no solamente vamos a exigir estar en unos Juegos Olímpicos, sino ser altamente competitivos para poder lograr el Diploma Olímpico, todos los jóvenes están conscientes de eso.
“Debemos motivarlos a que deben buscar la cúspide en unos Juegos Olímpicos y si no tienes esa actitud o mentalidad no tiene nada que hacer, así también nuestros entrenadores y nuestros presupuestos, entre más tengamos podremos desarrollar más”, detalló.
Pero no todo debe centrarse en los triatletas, sino también en los entrenadores que también tengan el talento y de tiempo completo, especializados en el desarrollo, en la labor con juveniles y Sub 23, que muestren actitud y deseo tanto en las modalidades individuales como en relevos.
“Y también estamos en la búsqueda de ese prototipo de entrenador. Me parece que la nueva generación de entrenadores saldrá de estos atletas que vienen con la experiencia mundial, apasionados, trabajadores, que han vivido cosas duras y creo que lo harían muy bien”, destacó.
Fechas a seguir para los triatletas mexicanos: el 28 de abril, el Selectivo a Juegos Panamericanos a desarrollarse en Bermuda; el seis de mayo, el Campeonato Panamericano de Monterrey que da puntos para la clasificación a Juegos Olímpicos y el 27 de julio en los Juegos Panamericanos de Lima; además de las fechas de la Serie Mundial, que concluirá con la Gran Final en Lausana del 29 de agosto al primero de septiembre.