Bosnia y Eslovenia apuestan al carbón ante crisis climática
*Obtienen el premio “Fósil del día” por ir en contra de los objetivos de la COP25
diciembre 5, 2019
Notimex. Bosnia y Eslovenia se llevan el premio “Fósil del día”, en la segunda jornada de trabajos de la Conferencia de las Partes de la Convención Maco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP25).
Lo anterior, porque Eslovenia quiere financiar la adicción de Bosnia al carbón, a través del NLB Banka, propiedad del gobierno y del Banco Europeo para la Reconstrucción y Desarrollo.
Si bien, los líderes mundiales se reúnen para abordar el cambio climático mediante la reducción de las emisiones a través de la eliminación gradual del carbón y combustibles fósiles, mientras Europa se prepara para ser el primer continente climáticamente neutral, la Red de Acción Climática (CAN, por sus siglas en inglés) consideró importante mencionar que es vergonzoso que los bancos europeos trabajen en otra dirección.
El tercer premio «Fósil del Día» fue para Bélgica, que debido a que quizá no alcanzará los objetivos climáticos de 2030, pues su ritmo de acción no es el adecuado.
A principios de año, Joke Schauvliege, ministro del clima, afirmó que los árboles «solo servían para talar»; ante esta declaración, tuvo que renunciar.
Bélgica no tiene ley climática y aunque envió cuatro ministros a la COP25 se negó a firmar los acuerdos alcanzados. Cabe señalar que es la nación más contaminada en términos de dióxido de nitrógeno.
Los premios “Fósil del día se presentaron por primera vez en las conversaciones sobre el clima en 1999, en Bonn, iniciadas por el Foro de ONG alemanas.
Durante las negociaciones de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, los miembros de la Red de Acción Climática votan por los países que consideran hacen todo lo posible para bloquear el progreso.
La Red de Acción Climática (CAN) es una red global de más de mil 300 organizaciones no gubernamentales (ONG) en más de 120 países que trabajan para promover la acción gubernamental e individual para limitar el cambio climático inducido por el ser humano a niveles ecológicamente sostenibles.