Ante escasez de agua, más de 25 mil mujeres cosechan la lluvia
septiembre 5, 2022
Hasta el momento, en la Ciudad de México, se han instalado más de 38 mil 444 mil sistemas del programa Cosecha de Lluvia, de los cuales el 67 por ciento se colocaron en hogares liderados por mujeres, en las alcaldías Iztapalapa, Tláhuac, Tlalpan, Xochimilco, Gustavo A. Madero, Magdalena Contreras, Milpa Alta, Azcapotzalco y Coyoacán.
Laura Galindo, jefa de familia y vecina de la alcaldía Gustavo A. Madero, es una de las más de 25 mil mujeres que cosechan la lluvia en la ciudad que dejó de condicionar sus actividades por la falta de agua. Ella y sus dos hijos tenían que limitar su consumo en las tardes y noches con la finalidad de disponer de agua en el tinaco a la mañana siguiente para bañarse, lavar trastes o en fines de semana, para lavar la ropa.
Hace dos años, se unió al programa Cosecha de Lluvia y desde entonces ya puede disponer de agua a toda hora, además de sentirse más tranquila con el medio ambiente porque ahora le da “otra oportunidad” al agua de la lluvia que antes se iba al drenaje.
En la colonia Industrial, donde vive, hay abasto diario, pero la presión en la red de agua potable disminuye de manera considerable a partir de las dos de la tarde y durante el resto del día. “Ahora con mi cosechador de lluvias tengo suficiente agua para estar lavando a la hora que yo quiera: en la mañana, a mediodía, en la noche, incluso entre semana, porque sé que voy a tener abastecimiento de agua sin mermar el tinaco, que es el que suministra el agua que tomo o uso para lavar los trastes”, explica.
La vecina de la colonia Industrial es beneficiaria del programa Cosecha de Lluvia en la modalidad parcial, mediante la cual recibió un subsidio del 50 por ciento y ella pagó la otra mitad del costo del sistema.
Una de las razones que la motivó a instalar el cosechador es el cuidado del agua en la Ciudad de México, donde el líquido, dice, es muy demandado y cada vez más personas necesitan este servicio.
“Antes yo me decía ‘ay, estoy consumiendo mucha agua’. Más allá del pago, es el uso del agua que mucha gente no tiene”, describe.
Por eso recomienda adoptar un sistema de captación pluvial para aprovechar el agua que cae durante varios meses en la capital del país. “Es otra oportunidad para el agua” y si bien el líquido no es para beber, comenta, en su experiencia el agua captada por el cosechador es de “muy buena calidad”.
“Podemos aprovechar esa agua que definitivamente sale de muy buena calidad. Al usarla cuando lavo, mi ropa sale sin ningún olor diferente, no me la ha dañado ni sale sucia, al contrario, sale muy transparente el agua que echo a mi lavadora, la reviso, la huelo y no tengo ningún problema”, resalta.
En la casa de Laura, la captación de lluvia ocurre de una forma distinta a la habitual, al colectar el líquido que escurre por una techumbre de lona que cubre su azotea. Por lo regular, la captación se da en techos de losa de concreto, donde el agua se acumula y se canaliza hacia los tanques de almacenamiento. Pero en este caso, Laura ya contaba con un techo conformado por una estructura metálica a dos aguas, cada una con canaletas que llevaban el líquido al drenaje.
Ahora, en lugar de que el líquido se vaya a la coladera, una de estas canaletas está conectada al cosechador de lluvia y el agua ya no se desperdicia. Su sistema cuenta con un tinaco de mil 100 litros, el cual se puede llenar en dos días con lluvias de magnitud media, e incluso se puede llenar en un solo día cuando ocurren tormentas muy fuertes.
Recuerda que, para mantener un funcionamiento óptimo, es necesario dar mantenimiento periódico al sistema, mediante la limpieza y revisión de sus componentes, como filtros, clorador, mangueras y bomba.