Cuatro de cada 10 cafetaleros abandonan su actividad en Veracruz

marzo 12, 2024

Juan David Castilla.- En las últimas dos décadas, cuatro de cada 10 pequeños y medianos productores de café abandonaron su actividad en el estado de Veracruz, perdiéndose una superficie de miles de hectáreas de este fruto.

En la entidad jarocha hay diez regiones cafetaleras, de las cuales el potencial más fuerte de producción es Huatusco, Córdoba, Zongolica y Coatepec, donde el café robusto gana terreno porque es utilizado por empresas, como Nestlé, para los solubles, que mayormente son considerados de menor calidad debido a su adulteración con azúcares y otros químicos.

Cirilo Elotlán Díaz, integrante del Consejo Regional del Café de Coatepec, cuenta que en el último censo del año 2005 había alrededor de 585 mil productores de café a nivel nacional, 90 mil en Veracruz y 15 mil en la región de Coatepec, un Pueblo Mágico localizado a solo ocho kilómetros de distancia de la ciudad de Xalapa, la capital.

Se estima que aproximadamente el 40 por ciento de los productores de café dejaron de cultivar, debido también al crecimiento desmedido de la mancha urbana, la construcción de fraccionamientos donde antes había cafetales y la sustitución de estos por cultivos de limón, caña y otros frutos que representen una mayor ganancia económica al campesino.

El problema es grave en Coatepec, donde hace 19 años había 33 mil hectáreas de café y ahora más de la mitad de los productores prefirieron dedicarse a otra cosa por el castigo a los precios y una serie de factores que afecta a la producción arábica, un café de altura bajo sombra, que crece entre los 600 y 2 mil 400 metros sobre el nivel del mar.

De acuerdo con el también Secretario de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), se prevé que los cultivos de café arábico podrían desaparecer en cuatro o cinco años, también por la falta de apoyos gubernamentales, de lluvias y de mano de obra.

El asunto se agravó tras la desaparición del Instituto Mexicano del Café, en 1989, pues cambiaron las leyes por las políticas neoliberales, orientadas hacia un mercado globalizado, donde unas cuantas compañías, como Nestlé y Cafés California, por mencionar algunas, controlan el mercado a nivel mundial.

Tan solo la cosecha de café en la región de Coatepec, en el ciclo 2023-2024, fue catastrófica debido al adelanto causado por el cambio climático y a los bajos precios pagados a los productores. Los precios de bolsa y la intermediación de las comercializadoras también afectaron negativamente a los caficultores.