En manos de un juez devastación por fracking de región totonaca en Veracruz

abril 5, 2024

Juan David Castilla.- Pobladores y ambientalistas, que defienden el territorio totonaca en Papantla, al norte de Veracruz, del fracking, exigieron al Juez Décimo Tercero de Distrito en el Estado de Veracruz que emita una sentencia al amparo promovido en 2023 para que se frene dicha actividad devastadora en la entidad.

A casi un año de que habitantes de 14 comunidades totonacas interpusieran la demanda de amparo en contra del uso del fracturamiento hidráulico como método de extracción de hidrocarburos en su territorio, organizaciones de la sociedad civil hicieron un llamado a la autoridad judicial para que ordene las pruebas científicas necesarias para emitir una sentencia que profundice en las problemáticas asociadas a dicho problema.

En la demanda de amparo, presentada el 22 de marzo del 2023, en el Día Mundial del Agua, las y los habitantes reclaman que el fracking afecta gravemente su patrimonio biocultural y viola sus derechos humanos, particularmente el acceso a la información ambiental, a la participación, al agua y a un ambiente sano.

En por lo menos mil 231 pozos petroleros y el 56.8 por ciento del total de pozos del municipio de Papantla se ha usado fracking, una técnica de extracción de hidrocarburos altamente nociva para el medio ambiente y la salud humana, sin proporcionar información adecuada ni consultar a las y los habitantes.

Por la importancia nacional e internacional de este caso, la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) presentó el pasado 29 de enero un escrito legal (amicus curiae) que proporciona al juez información técnica y científica relacionada con los efectos que el fracking tiene en las personas, las comunidades, el clima y los ecosistemas.

En el escrito se resaltan también diversos estándares internacionales vigentes en la materia y ejemplos de cómo se han resuelto casos similares en otras partes del mundo.

Expertas y expertos internacionales explican los riesgos que implica el uso del fracking por la contaminación del agua, el aire, los suelos y los alimentos con afectaciones a seres vivos.