Greenpeace México devuelve ‘la basura electoral’ a partidos
mayo 21, 2024
Activistas de Greenpeace México devolvieron en las sedes de los principales partidos políticos y líderes de coaliciones, pendones y lonas de propaganda electoral recogidos de puentes peatonales, postes y camellones de la Ciudad de México.
⇒ Además, durante la acción desplegaron el mensaje “La basura electoral es una mala elección”.
La colecta fue realizada los días 18 y 19 de mayo en varias colonias de Coyoacán, Tlalpan, Benito Juárez, Iztapalapa y Miguel Hidalgo. La mayor parte de la basura electoral encontrada correspondió a Morena y el PAN. De Movimiento Ciudadano (MC), solamente se encontró un pendón.
Sin estar a favor o en contra de ningún partido político en particular, la acción busca responsabilizar a partidos e instituciones electorales en el problema de la generación de residuos plásticos de un solo uso durante las campañas electorales y alentar la búsqueda de soluciones futuras para la promoción de candidatas y candidatos que no impliquen la generación de basura electoral.
Ornela Garelli, campañista de Océanos sin Plásticos de Greenpeace México, afirmó que “en medio de una crisis ambiental sin precedentes, donde problemáticas como el cambio climático, la pérdida de especies y la contaminación por plásticos nos amenazan a nivel planetario, es inadmisible que los partidos políticos y coaliciones inunden nuestras ciudades con propaganda electoral hecha con plásticos que ya vemos rota, tirada en las calles y que solo engrosará la cantidad de residuos plásticos que se generan en el país cada día”.
“Los residuos de plásticos de un solo uso han llegado prácticamente a todos los rincones de la Tierra, afectando al menos a 700 especies marinas y ocasionando problemas de salud pública. Los partidos políticos e instituciones electorales deben asegurar que esta basura no llegue a los ecosistemas y proponer formas alternativas de hacer campañas”, puntualizó.
Campaña tras campaña electoral, la ciudadanía mexicana encuentra pendones de plástico colgados en postes, puentes, poniendo en riesgo a peatones y conductores al invisibilizar el paso. Al concluir estas campañas, miles de estos pendones terminarán tirados o destruidos en el suelo, y al recolectarse, terminarán formando toneladas de basura plástica, sin un plan de reciclaje, con implicaciones negativas para la biodiversidad y el clima del planeta.