Académicas UV participan como consejeras consultivas del Inmujeres
Redacción/El Demócrata. Estela Casados González y Luz Jiménez Portilla, profesoras-investigadoras de la Universidad Veracruzana (UV), participan en el Consejo Consultivo del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), la primera se desempeñó en el encargo durante el periodo 2018-2021 y la segunda hará lo propio en el 2021-2024.
En la convocatoria para conformar el órgano, que el próximo 1 de diciembre rendirá protesta, se especifica: “Las consejeras consultivas tienen como función principal la de asesorar al Instituto en lo relativo al Programa Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (Proigualdad) 2020-2024 y en los demás asuntos en materia de igualdad de género y de mujeres que sean sometidos a su consideración, además de impulsar y favorecer la participación de los sectores interesados en las acciones relacionadas con el objeto de la Ley del Instituto Nacional de las Mujeres”.
Así, el Consejo Consultivo, conformado por 16 consejeras cuyo encargo tiene un carácter honorífico, es el asesor y promotor de las acciones que se emprendan en beneficio de las mujeres del país.
En el caso de Estela Casados, es profesora-investigadora de la Facultad de Antropología (FAUV) y coordinadora del Observatorio Universitario de Violencias contra las Mujeres, mientras Luz Jiménez lo es del Centro de Estudios de Género (CEGUV) y a su vez coordina la Maestría en Estudios de Género. Ambas son integrantes de la Red de Mujeres Feministas de Veracruz (Remufever).
“Como persona que está enfocada en la academia, pero también participando en la sociedad civil, me pareció importante llevar la experiencia y también, en la medida de mis posibilidades, la voz de la sociedad civil de Veracruz”, comentó la académica de la FAUV.
Otro de sus propósitos era aprender y fueron dos los puntos que al respecto destacó: “Me llevo el conocimiento de los feminismos provenientes de las diferentes entidades, porque teníamos mucha convivencia con el Consejo Social, también del Inmujeres. Conocer a todas estas mujeres y personalidades fue muy enriquecedor y me mostró que hay maneras y formas de conocer esas trayectorias”.
El segundo aprendizaje consistió en confirmar que al andamiaje institucional a nivel federal le falta para ser independiente de las inercias burocráticas patriarcales:
“Lo que observamos en los gobiernos municipales y estatales sucede en el Instituto Nacional, en el sentido de que dependen mucho de las decisiones y del apoyo que el titular del poder Ejecutivo le dé. Tienen que hacer mucha negociación, mucho cabildeo y se mueven con una diplomacia tal que puede ser atrapada por la burocracia de orden patriarcal. Es un trabajo muy difícil, que a veces está sostenido con alfileres, incluso presupuestalmente.”
El Consejo Consultivo en el que participó Estela Casados fue elegido en la administración de Enrique Peña Nieto y vivió la transición entre gobiernos a nivel federal, como el cambio de la titular del Instituto; mientras que Luz Jiménez llegará este 1 de diciembre y hasta el 30 de noviembre del 2024 a una dinámica de trabajo ya consolidada.
Somos un equipo feminista
Por su parte, la académica del CEGUV hizo hincapié en que son una suerte de equipo feminista y le tocó relevar a una compañera, “vamos dándonos la mano”, citó para ilustrar su sororidad con Estela Casados.
Al igual que su antecesora, dijo sentir un gran compromiso con esta encomienda y creer que parte de su quehacer como feministas, dentro de los espacios que estén, es impulsar transformaciones sociales y políticas.
Compartió su principal razón para postularse: “Aunque estamos adscritas a una universidad pública y trabajamos desde la academia, desde la docencia y la investigación, tenemos un compromiso político. Eso marca una diferencia entre académicas y académicos de otros campos y disciplinas, y las feministas.
“Nuestro papel no se queda en la producción de conocimiento o la enseñanza, sino que queremos aportar con lo que nos corresponde, desde nuestro papel de académicas, en otros espacios políticos.”
En su caso, no vivirá una transición política, pero puso a consideración que el Proigualdad 2020-2024 se elaboró cuando aún no se estaba en confinamiento por la pandemia Covid-19 (que ha exacerbado o puesto en evidencia las violencias contra las mujeres).
En sus palabras, será interesante ver cómo se pondrán en marcha políticas públicas en un contexto de pandemia, habiendo planteamientos que se pensaron antes de que ésta se hiciera presente. Pero a la vez, remarcó que hay esperanza: “La rabia por un lado y la esperanza por otro, mueven al movimiento feminista”.
Estela Casados comentó que no es gratuito que precisamente en la pandemia se generalizó y extendió la intervención de espacios públicos durante las marchas feministas, cuando antes era habitual únicamente en la Ciudad de México o algunos puntos específicos del país.
“No es gratuito porque muchas situaciones de violencia se han generado paralelamente a la crisis sanitaria que tenemos. Eso no hay que perderlo de vista. En estas emociones, que ya nos remitía Luz, están engarzadas: la ira, el miedo, el enojo, la tristeza, la importancia, el querer hacer algo y no saber qué.”
Cabe citar que la última sesión presencial de la Junta de Gobierno del Inmujeres fue el 19 febrero del 2020 y está programada que la toma de protesta de sus órganos auxiliares, los consejos Consultivo y Social, sea la primera presencial de esta pandemia.