Aumentó 300% las incautaciones de fentanilo en la frontera con Estados Unidos en los últimos 4 años: IPM

junio 6, 2023

El año 2022 estuvo marcado por cambios continuos en el panorama de la delincuencia organizada en México, la cual está totalmente ligada al tráfico de drogas hacia Estados Unidos y principalmente por la producción y distribución de fentanilo, de acuerdo con el análisis realizado por el Instituto para la Economía y la Paz y presentado en la décima edición del Índice de Paz México 2023.

Desde hace 10 años, cuando sólo unas cuantas entidades en Estados Unidos habían legalizado el uso recreativo de la marihuana, el volumen de incautaciones de esta en todos los puntos de entrada hacia ese país se totalizó en cerca de 1,350 toneladas. Para 2022, la cifra disminuyó considerablemente ya que sólo se logró incautar 70.2 toneladas, que representa una caída del 95%. Los datos reflejan una disminución sustancial en la rentabilidad de la marihuana, lo que ha llevado a las organizaciones narcotraficantes a expandir su tráfico de otras drogas, siendo el fentanilo la más frecuente, lo que se demuestra con el aumento en un 300% en las incautaciones de fentanilo en los últimos cuatro años.

Entre los años 2015 y 2022, el volumen total de fentanilo incautado en todos los puntos de entrada de Estados Unidos aumentó de 31.8 kilogramos a 6,668 kilogramos. Una tendencia casi idéntica se observó dentro de México durante un periodo comparable, de 2016 a 2022, el volumen de fentanilo incautado por las autoridades mexicanas en todos los estados aumentó de 11 a 2,114 kilogramos, un aumento de 192 veces. La mayoría de estas incautaciones se realizó en la región noroeste del país.

Carlos Juárez, Director en México del Instituto para la Economía y la Paz comentó: “Al igual que en los Estados Unidos, en México también ha habido un fuerte aumento en el número de sobredosis de fentanilo en los últimos años, aunque la escala del problema es mucho menor. Entre 2019 y 2021, la cantidad de personas tratadas por sobredosis de fentanilo en México aumentó en un 636%. La mayoría de esas sobredosis ocurrieron en Sonora, Baja California y Sinaloa, que en conjunto representaron 115 de los 184 casos experimentados a nivel nacional. Tanto Baja California como Sonora son estados fronterizos, mientras que Sinaloa es la base del Cártel de Sinaloa y un punto principal de producción de fentanilo”.

El cambio a la producción de fentanilo, por parte de los grupos delictivos, ha sido muy lucrativo, esta droga es extremadamente potente y relativamente barata de producir, a menudo su forma de comercialización es en forma de píldora, lo que significa que se pueden obtener muchas más ganancias con relación al volumen de la droga que se trafica. El margen de beneficio de los precios del fentanilo cuando se vende y distribuye puede ser hasta 2,700 veces el precio que se necesita para producirlo.

Debido a su bajo precio, el fentanilo a menudo se mezcla con otras drogas, como la heroína o la cocaína, para hacerlas más poderosas y más baratas de producir. La potencia de la droga ha provocado un aumento en las muertes por sobredosis tanto en los Estados Unidos como en México en los últimos años. Según datos de los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos, los opioides sintéticos, principalmente el fentanilo, estuvieron involucrados en más de dos tercios de las aproximadamente 108,000 muertes por sobredosis en los Estados Unidos en 2022.

“México ha sido visto tradicionalmente como un productor o punto de tránsito de drogas con destino a Estados Unidos y su mercado interno de drogas también ha estado creciendo en los últimos años. La tasa de delitos de narcomenudeo no fue sólo el subindicador de la delincuencia organizada que experimentara, por mucho, el mayor aumento en los últimos ocho años; también fue el único subindicador que ha aumentado constantemente cada año desde 2016. Esta tendencia destaca la creciente dependencia de las ventas a los consumidores locales“ aseguró Carlos Juárez.

El mercado de la marihuana ilícita en los Estados Unidos ha ido cayendo en los últimos años, lo que llevó a una dependencia cada vez mayor de otras formas de delincuencia organizada, como la extorsión, el narcomenudeo, la fabricación y el tráfico del opioide sintético fentanilo. En este contexto, se ha presentado una mayor competencia en los últimos años entre los grupos de la delincuencia organizada. Éste es especialmente el caso de los dos cárteles más poderosos del país, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa, que están en conflicto por las rutas críticas de distribución a los Estados Unidos, así como por el control de las organizaciones delictivas locales. Según los datos del Uppsala Conflict Data Program, sólo en 2021 se produjeron 4,890 muertes a causa de su conflicto.

Homicidios y tráfico de drogas.

El municipio de Zamora, Michoacán tuvo la tasa de homicidios más alta de todas las ciudades de México en 2022, con un estimado de 200 muertes por cada 100,000 habitantes. En los últimos años, este municipio se ha convertido en un epicentro del conflicto de cárteles en Michoacán. En todo el estado, los grupos delictivos se han involucrado en una feroz competencia por la producción de metanfetaminas y heroína en laboratorios clandestinos, así como por la recepción y distribución de productos químicos precursores de Asia para sintetizar fentanilo a través del segundo puerto más grande de México en la ciudad de Lázaro Cárdenas.

Al igual que Michoacán, San Luis Potosí es un punto de tránsito clave para las drogas que ingresan a los Estados Unidos y es la puerta de entrada a los estados del noreste de México. Su ciudad capital es un importante centro de transporte interior donde los productos como el fentanilo, producido en los estados del oeste, pueden pasarse de contrabando por la frontera con otras mercancías. Por esta razón, San Luis Potosí representa un lugar estratégico para los cárteles y es un territorio frecuentemente disputado. Si bien el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Zetas y el Cártel del Golfo son los principales cárteles de la región, existen más de 18 cárteles en el estado, ubicados en el 70% del territorio.

En 2022, el estado de Colima registró la tasa de homicidios más alta de todos los estados en los últimos ocho años, con 110 muertes por cada 100,000 habitantes. Esta tasa representa un importante resurgimiento de la violencia después de que Colima experimentó un año relativamente más pacífico en 2021, durante el cual los homicidios cayeron un 17.9%. Sin embargo, desde 2015, Colima generalmente ha registrado tasas extremas de homicidios, ya que su tasa ha sido la más alta del país en cinco de los últimos ocho años.

La violencia de Colima se ha relacionado en gran medida con las luchas entre cárteles de la droga por el control del puerto más activo de México en la ciudad de Manzanillo, que es un punto clave de entrada de productos químicos precursores para sintetizar fentanilo y metanfetaminas, provenientes de Asia.