Australia, un fin de año de incendios

diciembre 26, 2019

Sydney/Notimex. Australia ha vivido una situación de emergencia por una ola de incendios forestales «catastróficos», agravados por las altas temperaturas y los fuertes vientos, que arrasan con todo a su paso y que amenazan áreas altamente pobladas alrededor de esta ciudad, Wollongong y Newcastle.

Más de 120 incendios forestales devastan los estados de Nueva Gales del Sur y Queensland, de los cuales la mitad siguen sin control, con un balance de al menos una docena de personas muertas y cientos de casas o propiedades destruidas y al menos tres millones de hectáreas quemadas.

Las autoridades australianas han declarado por segunda vez el estado de emergencia en el estado de Nueva Gales del Sur desde el comienzo de la temporada de incendios en septiembre.

La primera ministra de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian, justificó la decisión por las «condiciones meteorológicas catastróficas», incluidas las altas temperaturas que van de récord en récord.

Más de dos mil bomberos luchan contra el fuego con la ayuda de militares y de equipos de bomberos de otras partes del país y de Canadá.

Los cientos de incendios forestales que asolan Nueva Gales del Sur, la gran mayoría fuera de control, han provocado grandes nubes de humo tóxico que se ciernen sobre Sydney, la ciudad más grande de Australia.

Nube tóxica cubre Sydney

El humo de los incendios llegó a cubrir a Sydney, aumentando la contaminación del aire a niveles tan peligrosos que las autoridades sanitarias tuvieron que declarar la «emergencia de salud pública».

«La humareda procedente de los incendios generó una contaminación del aire hasta 11 veces superior a un nivel considerado ‘peligroso’, en algunas zonas de Sydney y de Nueva Gales del Sur», advirtieron organizaciones profesionales de médicos, entre ellos la Royal Australasian College of Physicians.

Los servicios de salud de Nueva Gales del Sur registraron un aumento del 80 por ciento del número de personas que acudieron a urgencias médicas por problemas respiratorios.

Además de Sydney, otras ciudades como la capital, Canberra, superan estos días los índices de contaminación que habitualmente se registran en otras megalópolis asiáticas castigadas frecuentemente con altos niveles de polución.

Temperaturas récord

Por si esto fuera poco, a esta emergencia se sumó un ola de calor que asoló la costa este de Australia. Con la llegada del verano -1 de diciembre al 28 de febrero- aumentan las temperaturas a niveles récord, exacerbando cientos de incendios en su camino.

Australia estableció un récord para su día más caluroso por segundo día consecutivo a mediados de diciembre, con una temperatura nacional promedio de 41.9 grados Celsius, un grado más alto que la marca anterior.

De acuerdo con la Oficina de Meteorología Australiana (BOM), el nuevo máximo promedio nacional se alcanzó el 18 de diciembre, superando los 40.9 grados alcanzados un día antes, que superó el récord anterior de 40.3 en enero de 2013.

La ola de calor exacerbó una serie de incendios forestales sin precedentes alimentados por la sequía que asola grandes áreas de Australia.

¿Es el Cambio climático culpable?

El cambio climático es una «emergencia nacional» que está «impulsando desastres naturales como los incendios forestales catastróficos actuales», señaló el exjefe de bomberos de Nueva Gales del Sur Greg Mullins, tras acusar al gobierno de Australia de ignorar sus advertencias sobre este fenómeno.

El cambio climático está provocando que los incendios forestales «comiencen antes … y ardan más», dijo Mullins.

Un informe realizado por la Oficina de Meteorología de Australia y la Organización de Investigación Científica e Industrial del Commonwealth (CSIRO) determinó que el cambio climático está detrás del incremento de la cantidad y duración de los incendios forestales en Australia.

Los exjefes de bomberos advirtieron que lo peor del verano está «todavía por delante», después de expresar su alarma por la magnitud y la gravedad de los incendios forestales de primavera.

Críticas al Gobierno por inacción

      Los exjefes de bomberos acusaron al gobierno del primer ministro Scott Morrison de mostrar una «falta de liderazgo» y de crear un «vacío político» al minimizar las preocupaciones sobre el cambio climático.

Por su parte, el primer ministro admitió la relación entre los incendios y el cambio climático, pero reiteró que su Gobierno no cambiará su política contra el calentamiento global.

Al mismo tiempo, Morrison pidió disculpas por haberse ido de vacaciones en medio de una de las peores oleadas de incendios forestales. El primer ministro, que se encontraba en Hawái con su familia, interrumpió su paseo y regresó a Australia tras días de críticas y protestas por su ausencia y falta de liderazgo ante una crisis que ha causado una docena de muertos, entre ellos dos bomberos.

«Entiendo el enfado de la gente al saber que estaba de vacaciones con mi familia mientras sus familias estaban bajo una gran presión. (…) A esos australianos a los que he decepcionado les pido disculpas por ello», añadió.

En el estado de Queensland, al norte de Nueva Gales del Sur, también se han reportado más de 70 incendios forestales, incluido uno en Peregian, cerca del centro turístico costero de Noosa. Los incendios forestales también están ardiendo en el sur y el oeste de Australia, lo que hace que para la isla continente este 2019 e inicios de 2020 se constituyan en una etapa de las más peligrosas que ha tenido que enfrentar en su historia reciente.