Con impunidad y echándole la culpa al pasado no se puede construir un México de paz

julio 24, 2022

Yhadira Paredes 

Xalapa, Ver.- Luego de unirse al sufrimiento y el dolor de miles de familias mexicanas que buscan a sus hijos, hijas nietos, nietas, padres y madres desaparecidos, viviendo la violencia y la impunidad, el arzobispo de la Arquidiócesis de Xalapa, Jorge Carlos Patrón Wong consideró que con impunidad y echándole la culpa al pasado no se puede construir un México de paz.

En la la misa de este domingo desde la Iglesia Catedral de Xalapa, el prelado católico destacó que se unen a todas las celebraciones eucarísticas del país para orar por los desparecidos, además sostuvo que las fotografías que se llevaron dan cuenta de que son muchos muy jóvenes que han sufrido esta violencia. 

Ya en su homilía dejó en claro que no se puede construir un México de paz echando todo el tiempo la culpa al pasado y enfrentando a los mexicanos y mexicanas unos otros y lamentó que la patria y las relaciones sociales se hayan quebrado porque no ser capaces y no poder orar y relacionarse como hermanos del mismo padre.

«Orando y viviendo como hermanos y hermanas nosotros decimos: no, nunca jamás a esas narrativas, a esas historias cotidianas que nos quieren lanzar de que somos enemigos unos con otros. Lo único que hacen es recalcar las diferencias entre los mexicanos para que no vivamos teniendo un padre nuestro, para que no vivamos como hermanos, vivamos creando conflictos, rivalidades y violencia».

El Arzobispo aseveró que cuando los mexicanos oran dicen no a aquellos que siempre hablan de que la solución es la violencia, estar unos contra otros, que vivamos con revanchas y a no vivir la vida de Dios y a perdonar.

LLAMAN A ORAR POR LOS ABUELITOS Y ABUELITAS

Por otra parte, Jorge Carlos Patrón Wong pidió orar por los abuelos y abuelas, vivos y fallecidos, quienes siempre están pendientes de orar por sus familias y por su país.

“Nos recuerda a nuestros abuelitos que siempre están pidiendo por sus hijos, por sus nietos, por la familia, por México. Son un recordatorio viviente de lo que es oración. Siempre están ofreciendo la eucaristía por nosotros y nos hacen recordar que nos han acompañado en la fe, son los primeros en preocuparse para que los hijos no se alejen de Dios”, finalizó.