Hay tecnologías en México para captar agua de lluvia y acabar con la escasez
Xalapa. El Demócrata. Con un sistema adecuado y práctico de captación de agua de lluvia, al menos 15 millones de mexicanos que padecen la escasez del vital líquido se podrían beneficiar sin necesidad de entorpecer la vida de los ecosistemas donde nace el agua que arrebatamos a los mantos acuíferos y ríos, tal como sucede con el sistema de agua potable por gravedad para Catemaco, por ejemplo.
Si bien el proyecto impulsado desde la Comisión de Aguas del Estado de Veracruz (CAEV) y el ayuntamiento de Catemaco , beneficiará a miles de personas de las colonias cercanas a la cabecera municipal, también desataría la destrucción de selva en predios cercanos al afluente donde se encuentra la cascada Cola de Caballo, zona limítrofe con la biosfera de Los Tuxtlas.
Este caso y similares se repiten en toda la república mexicana donde las acciones políticas que se ofertan como bien común no se analizan desde los puntos de vista adecuados y críticos, contrario a ello se limitan a los resultados inmediato, mercantil, además de improvisados, se trate de gobiernos de izquierda o derecha.
Por ello la necesidad de replantear las políticas públicas enfocadas al desarrollo social urbano y rural con respeto a las leyes de protección de la naturaleza de la que dependemos.
El investigador y promotor del agua de lluvia, Manuel Anaya Garduño afirma que la captación de agua de lluvia no sólo representa un potencial de grandes dimensiones en la dotación de agua potable a comunidades marginadas y con pocos recursos, sino que permite la práctica de pequeñas explotaciones agrícolas y pecuarias, el combate y control de incendios y propicia un cambio de vida entre la población de más de 150 mil pequeñas comunidades rurales que existen en nuestro país.