Ignorar los mandamientos a llevado a una sociedad violenta: Arzobispo

mayo 26, 2019

Yhadira Paredes/Xalapa. El Arzobispo de la Arquidiócesis de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, recordó que el conducirse en la vida sin respeto a los mandamientos ha originado que se tenga un ambiente de inseguridad, violencia, secuestros, asesinatos, por lo que aseguró que la sociedad sería muy distinta si se cumplieran.

Además aprovechó para felicitar a los miles de jóvenes que este fin de semana presentaron examen de admisión a la Universidad Veracruz y reconoció que la máxima casa de estudios no cuenta con los espacios suficientes, por lo que les hizo un llamado a no desesperarse y buscar otras alternativas, como becas en escuelas privadas para no dejar de estudiar. 

En el primer tema, señaló «no cumplimos el quinto mandamiento de No Matarás y tenemos tanta muerte, no cumplimos el mandamiento de Honrarás a tu padre y madre y tenemos tanta ingratitud; no cumplimos el de respetar la sexualidad y tenemos tanta agresión, adulterio, trata (de personas), prostitución”. 

Ante la feligresía católica reunida en la Iglesia Catedral de Xalapa agregó que al no cumplir el octavo mandamiento de no mentir y no hacer falso testimonio se tiene una sociedad que no es sincera “no es derecha”. 

De ahí la importancia del cumplimiento de los mandamientos que expresan el amor que guardan a Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo.

“Por eso pedimos a Dios que llene nuestros corazones de amor y nos de la fuerza de cumplir sus mandamientos”, aseveró. 

Asimismo, aprovechó para exhortar a los católicos que rescaten la oración que se estableció en 2011 cuando inició la época más difícil de inseguridad, dada la situación de violencia, de secuestros, asesinatos que afecta todos los días a las familias y a todos. 

Y la recordó “Señor Jesús tú eres nuestra paz, mira nuestra patria dañada por la violencia y dispersa por el miedo y la inseguridad, consuela el dolor de quienes sufren, da acierto a las decisiones de quienes nos gobierna, toca el corazón de quienes olvidan que somos hermanos y provocan sufrimiento y muerte, dales el don de la conversión. Protege a las familias, a niños, adolescentes y jóvenes, nuestros pueblos y comunidades, que como discípulos misioneros tuyos, ciudadanos responsables, sepamos ser promotores de tu justicia y paz, para que en ti nuestro pueblo tenga vida digna”.