Javier Platas convoca a descubrir lo peculiar de Beethoven, Bach y Mozart

septiembre 14, 2020

La Jornada. Tres titanes de la música clásica: Ludwig van Beethoven, Wolfgang Amadeus Mozart y Johann Sebastian Bach protagonizarán el conversatorio Dosis clásicas para la pandemia, que impartirá el violonchelista Javier Platas Jaramillo.

El encuentro virtual, cuyas localidades cuestan 50 pesos, se articula por cuatro sesiones que se realizarán los lunes (del 14 de septiembre al 5 de octubre) a las 19 horas en el sitio electrónico https://bit.ly/32hFjXz.

La finalidad es abordar su vida y su obra, así como compartir algunas curiosidades que giran alrededor de esos genios universales, explica Javier Platas (Ciudad de México, 1959) en entrevista con La Jornada.

“La primera actividad –añade– se titula Ludwig y Cirilo. En ésta aludiré a las fascinantes similitudes que existen entre los sones mexicanos con, por lo menos, tres piezas del genio de Bonn. En 1987 estudié análisis musical con el maestro Humberto Hernández Medrano, cuando me atreví a decirle que el scherzo de la séptima sinfonía sonaba a Huapango. A lo que él respondió: ‘escucha el tercer cuarteto’.

“Me sorprendí bastante porque escuché El jarabe tapatío, pero además en el segundo concierto para piano identifiqué a Pica perica, canción que actualmente se interpreta en el norte del país, y también en la Séptima, a El rascapetate, respectivamente.

Otra singularidad es que en la sonata 32 para piano se escucha como boogie-woogie, estilo de blues basado en ese instrumento de forma rápida y bailable. Estoy seguro de que los asistentes virtuales disfrutarán adentrarse en la composición del luminoso maestro alemán, de quien se cumplen (en diciembre) 250 años de su natalicio.

Las charlas restantes que integran el conversatorio Dosis clásicas… son Ludwig van Beethoven, Wolfgang Amadeus Mozart y Johann Sebastian Bach.

“Otra situación bastante interesante –acota el también productor radiofónico– es que Mozart podía hablar al revés. De ahí que muchos lo aludan como Trazom (su nombre invertido). Él solía hablar así con su prima, y era muy mal hablado, por cierto.

Bach realizaba muchísimas cosas: daba clases de coro, de teclado, tocaba el órgano, componía, hacía arreglos musicales y cantatas para los servicios religiosos; tuvo 20 hijos y solía pelear con los músicos que él consideraba poco hábiles.