Monseñor Báez parte de Nicaragua, una salida vista como forzada

Transmitiría al máximo dirigente de la Iglesia católica todos los acontecimientos en la crisis sociopolítica en Nicaragua.

abril 23, 2019

Managua/Notimex. Con la esperanza de que un día prevalezca la justicia social en Nicaragua, monseñor Silvio José Báez se despidió hoy de los nicaragüenses y partió rumbo a Roma para integrarse a la Curia Romana, a la cual fue llamado por el Papa Francisco.

Aunque monseñor Báez dijo haber sido convocado por el Pontífice, precisó que no fue su decisión, por lo que su partida ha sido vista como un “exilio” impuesto, un “castigo” o que simplemente “lo hicieron a un lado”, pues desde que inició la crisis él ha denunciado los abusos del gobierno del presidente Daniel Ortega.

El ahora exobispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua partió del aeropuerto internacional Augusto C. Sandino, donde fue despedido por miembros de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, con quienes participó como mediador junto con otros obispos en el Diálogo Nacional con el gobierno.

“En obediencia al Papa Francisco estoy saliendo del país hacia Roma”, escribió esta mañana Báez en su cuenta de Twitter antes de abordar el vuelo que lo llevaría a Miami, donde pasará esta semana con su familia y posteriormente viajará a la capital italiana.

En la despedida en el aeropuerto, al que no acudió el cardenal Leopoldo Brenes ni nadie de la Conferencia Episcopal Nicaragüense (CEN), Báez dijo sentirse triste, pero que debía hacerlo por obediencia porque es un hombre de Iglesia y de fe, aunque afirmó que lleva “a todo el pueblo de Nicaragua en el corazón”.

Afirmó que transmitiría al máximo dirigente de la Iglesia católica todos los acontecimientos en la crisis sociopolítica en Nicaragua y que siempre estará al lado del pueblo nicaragüense, de acuerdo con reportes de la prensa independiente local.

La partida de Báez suscitó de inmediato una serie de comentarios por parte de diferentes personalidades que describieron como “incomprensible” la decisión del obispo de Roma y que el cardenal Brenes, quien ha sido la figura más cercana a Ortega, estaría incluso detrás de su salida.

El periodista y escritor nicaragüense Erick Aguirre dijo a Notimex que a Báez “lo han hecho a un lado”, a través de intrigas del más alto nivel, porque “se ha puesto del lado de la justicia, de los que sufren los embates e injusticias” tanto de la dictadura Ortega como de quienes se coluden con ella.

“Siendo un alto prelado de la Iglesia Católica, Báez no ha tenido miramientos al denunciar también a quienes maniobran y aflojan posiciones en las hasta ahora inútiles negociaciones con la dictadura. Por eso lo despachan. ‘Largo de aquí’, le están diciendo”, declaró Aguirre.

Para el exvicepresidente nicaragüense, el escritor Sergio Ramírez, se trata de un “exilio forzado” que constituye un duro golpe a la lucha por la democracia en Nicaragua, la cual de todos modos llegará al país “más temprano que tarde”, según escribió en Twitter.

Por separado, el periodista Carlos Fernando Chamorro, director del semanario Confidencial quien se exilió en Costa Rica por razones de seguridad, expresó su solidaridad con Báez y estimó que su salida “es un golpe moral contra el pueblo perseguido”.

Enfatizó además que la partida del obispo es un gran desafío para la Conferencia Episcopal Nicaragüense, “mantengan viva la voz profética que hace temblar a los tiranos”, tuiteó Chamorro.

La activista de derechos humanos, Bianca Jagger, dijo tener claro que la decisión de partir a Roma no fue de Báez, “sabemos que usted nunca nos hubiese abandonado voluntariamente. Lo estaremos esperando”.

Monseñor Báez se convirtió en una importante figura en la actual crisis nicaragüense, ya que denunció las atrocidades perpetradas por el régimen de Ortega y participó como mediador en las negociaciones con el gobierno para encontrar una solución pacífica.

Sin embargo, en diversas ocasiones quedaron en evidencia las diferencias que tenía con el cardenal Brenes.