Nunca tuve evidencia de García Luna en actividades ilícitas: Calderón

Ante la sentencia de 38 años de cárcel, dictada este miércoles en una corte de Nueva York contra el exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, el expresidente de México Felipe Calderón, se deslindó del caso asegurando que nunca tuvo “evidencia verificable”.

Por medio de una serie de publicaciones en X, el exmandatario mexicano aseguró que nunca contó con evidencia fidedigna acerca de que García Luna estuviera involucrado en actividades ilícitas, ni de haber recibido información por parte de agencias de inteligencia, mexicanas o extranjeras, de que así fuera.

“No he tenido acceso a las evidencias ni a los testimonios que se presentaron en el juicio, pero soy hombre de leyes y respeto la acción de los tribunales. Asumo que han actuado conforme a su leal saber y entender. Por lo mismo, soy partidario de que quien infrinja la ley debe asumir las consecuencias de sus actos“, manifestó.

Mi política de seguridad tuvo aciertos y errores. Enfrentamos a un enemigo poderoso que busca la Captura del Estado, es decir, controlar territorios por la fuerza, apoderarse de instituciones, corromper funcionarios y dividir y atemorizar a la sociedad. A pesar de todo, en 2012,…— Felipe Calderón ???????? (@FelipeCalderon) October 16, 2024

El exfuncionario de seguridad fue sentenciado a 38 años de prisión por cinco cargos relacionados con grupos de delincuencia organizada dictaminado por el juez Brian Cogan, quien lo acusó de haber llevado una doble vida, “compatibilizando su papel en una entrañable familia con otro como facilitador de una gran empresa criminal” al servicio del Cártel de Sinaloa.

“Usted dice que respeta la ley. Estoy seguro de que si le pongo el polígrafo enfrente, usted lo va a pasar, porque usted mismo se ha creído su historia. Pero es una de sus dos caras. La otra, la responsable de los delitos, existe”, expuso el juzgador.

Genaro García Luna, de 56 años, fue el responsable de la seguridad pública en el sexenio de Felipe Calderón durante su gobierno de 2006 a 2012, época en la que tuvo bajo su responsabilidad toda la estrategia de lucha antinarcóticos.

Con su sentencia, García Luna se convirtió en el más alto funcionario mexicano condenado en Estados Unidos, y se suma a otros mandatarios, como el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años de cárcel también por tener vínculos con el narcotráfico.