Ricky Martin, el rey del pop latino, posa junto a su esposo para Out Magazine
agosto 11, 2020
Debate. La majestuosidad de Ricky Martin forma parte de la nueva edición de la revista estadounidense Out Magazine, cuyos contenidos destacan noticias, historias de moda, estilos de vida y entretenimiento de personalidades de la comunidad LBGTQ+.
La entrevista aborda la paralización de su gira de conciertos, la ansiedad que le produjo inicialmente el distanciamiento social debido a la pandemia de COVID-19, la creación y producción de los álbumes «Pausa» y «Play», la cotidianidad en el hogar durante la cuarentena, los inicios de su carrera musical y su labor filantrópica a través de la fundación que lleva su nombre, y cuya misión es educar y prevenir la trata humana.
Asimsimo Ricky Martin habló sobre el futuro de su familia que ha formado con su esposo Jwan Yosef. «Hay momentos en los que quiero diez más (hijos), y luego están esas mañanas en las que todo el mundo llora y yo digo: ‘está bien, tal vez estemos bien los seis'», contó el astro boricua en la entrevista para Out Magazine.
«Ricky Martin, la revolución», es el título de la entrevista que fue publicada la tarde de este martes en plataformas digitales, acompañada de una diversidad de fotografías en las que el astro boricua aparece solo, con distintos cambios de ropa de conocidos modistas y acompañado de su esposo, el artista plástico Jwan Yosef.
Out Magazine describe a Ricky Martin como padre, rey del pop latino, activista, quien desde sus primeros días en la banda de chicos latinos Menudo, ha usado su plataforma y celebridad para arrojar luz sobre temas importantes, quien además fue embajador de UNICEF, pero que en 2000 lanzó «Ricky Martin Foundation» que ha utilizado para librar una guerra global contra la trata de niños. «Si no hago algo, estoy permitiendo que suceda», explicó el cantante sobre sus esfuerzos.
La publicación estadounidense recordó que en el verano pasado, Ricky Martin viajó a su natal Puerto Rico para pedir la renuncia del gobernador Ricardo Rosselló, cuyos mensajes misóginos y homofóbicos habían sido expuestos. El artista estaba allí, en medio de los 2 millones de personas reportadas en las calles, ondeando banderas y exigiendo justicia. Después de 15 días, la gente obtuvo lo que pidió. «Una cosa que siempre me voy a llevar es que después de esos días de protesta, mis hijos me esperaban en casa y yo sabía que se convertirían en revolucionarios por la pasión que tenemos por la justicia social y la equidad por todo».