Si no recuerdas lo que hiciste ayer, lee esta nota

diciembre 18, 2019

Redacción/Xalapa.- Lamentablemente cada vez más personas padecen la terrible enfermedad del Alzheimer, y su cura aún no ha sido conseguida. Pero, ¿Qué es el Alzheimer?, ¿Por qué se origina?, ¿Se puede prevenir?, ¿Hay tratamiento?. En El Demócrata te informamos un poco más acerca de esta enfermedad y las consecuencias que arrastra para el paciente y sus seres queridos más cercanos.

La Enfermedad de Alzheimer (EA) es una enfermedad neurodegenerativa que da lugar a un deterioro cognitivo adquirido de inicio insidioso, lento y progresivo, cuyas principales manifestaciones son la pérdida de memoria inmediata y los trastornos conductuales. Este padecimiento es la causa de demencia más frecuente en los adultos mayores de 65 años.

Un detonante que nos podría indicar si alguno de nuestros seres queridos podría desarrollar la enfermedad es la incapacidad de retener la información reciente o a corto plazo, pues se ve alterado el proceso de fijación, con lo que es muy frecuente atribuir estos despistes u “olvidos” a la vejez.

Las fases de la enfermedad se dividen en tres;

  1. Fase leve o inicial.
    • Sintomatología ligera, mantenimiento de la autonomía. Aparecen problemas sociales y laborales debidos a la enfermedad, pero se preserva su independencia.
    • Se afecta la memoria a corto plazo, aparecen olvidos o despistes.
    • Algunos cambios de humor y del comportamiento.
    • Lentitud en el aprendizaje y complicaciones en la comunicación y la comprensión del lenguaje escrito.
    • Rechazo a conocer nuevas personas y lugares, preferencia por lo que les resulta familiar.
    • La organización y la planificación resulta problemática.
  1. Fase Moderada:
    • Se va perdiendo la autonomía, el sujeto ya no es completamente independiente y comienza a requerir ayuda de su cuidador.
    • Pérdida de memoria a corto plazo y largo plazo. Olvidos cada vez más frecuentes e incapacidad y confusión a la hora de recordar acontecimientos de la historia personal.
    • Mayor dificultad para realizar tareas habituales, puede que sean autónomos en lo más básico, pero requieren de ayuda para otras actividades más complejas y se recomienda supervisión en las primeras.
    • Pueden no ser capaces de encontrar las palabras adecuadas, aparecen problemas de comunicación y lenguaje.
    • Desorientación en tiempo-espacio y dificultad en la toma de decisiones
    • Pérdida de la iniciativa.
    • Colocación de objetos en lugares equivocados.
    • Cambios de humor, de comportamiento y de personalidad más pronunciados.
  1. Fase Severa:
    • Aparecen dificultades en todas sus habilidades y en el lenguaje.
    • La pérdida de memoria es prácticamente total, no reconocen a las personas, no son capaces de alimentarse y no preservan el control de las funciones corporales.
    • Requieren de atención y cuidados constantes
    • Debilidad física muy acentuada.
    • Mantiene la capacidad para sonreír

No existe una causa concreta a la que se le pueda atribuir el Alzheimer. Al contrario, su etiología es multifactorial, es decir, existen una serie de factores de riesgo, tanto genéticos como ambientales que, al interferir entre sí, dan lugar a una serie de acontecimientos que resultan en el inicio de la enfermedad.

Los principales factores de riesgo implicados en son:

  • Influencia genética.
  • Edad: A los 65 la probabilidad de padecerla es del 10%, llegando hasta el 50% a los 85 años.
  • Sexo: No hay correlación, aunque se creen más casos de mujeres.
  • Escolarización y nivel educativo: A mayor escolaridad, menos probabilidad.
  • Hipertensión Arterial.
  • Antecedentes de Traumatismo Craneal.
  • Nutrición: Una dieta basada en altos niveles de ácidos grasos.
  • Depresión o Síndrome de Down.
  • Otros: Tabaco, estilo de vida sedentaria, diabetes y obesidad.

Aunque aún hoy en día no existe una cura definitiva para el Alzheimer, los grandes avances y el conocimiento más exhaustivo de la enfermedad permiten proporcionar un tratamiento cada vez más eficaz y con el menor número de efectos indeseados.

Los hay del tipo farmacológico, conductual y cognitivo.

Las principales técnicas incluidas en el tratamiento son:

  • Estimulación cognitiva (Memoria, lenguaje, atención, funciones ejecutivas, cálculo, gnosias, praxias)
  • Estimulación sensorio-motora
  • Modificación de la conducta
  • Rehabilitación logopedica
  • Entrenamiento en AVDs
  • Psicomotricidad
  • Laborterapia
  • Arteterapia
  • Musicoterapia
  • Actividades Asistidas con Animales
  • Taller de Relajación
  • Ludoterapia
  • Actividades Culturales
  • Entrenamiento psicoeducativo para familiares y cuidadores

A pesar de no poder evitar factores como el hereditario o la edad sí podemos prevenir que de ser propensos esta enfermedad nunca se desarrolle o bien, lo haga con mucha lentitud, permitiendo a los ancianos vivir con calidad de vida hasta el momento de partir.

Los principales factores a considerar para la prevención son:

  • Mantener dentro de los límites normales la glucemia, las cifras de colesterol y la tensión arterial.
  • Evitar a toda costa el tabaco.
  • Evitar alimentos ricos en grasas saturadas y ácidos grasos omega-6. Las principales fuentes de ácidos grasos saturados son la mantequilla, las carnes rojas, los embutidos, etc.
  • Hacer ejercicio.
  • Estimulación Cognitiva y vida intelectual activa.
  • Estar en constante aprendizaje de nuevas cosas, así como vivir nuevas experiencias constantemente.

Finalmente les presentamos un cortometraje que retrata la vida con Alzheimer y recordamos que aún cuando ciertas cosas escapen de nuestras manos, siempre podemos hacer algo para prevenirlo o mejorarlo.