Soldados rusos lanzan ataque sorpresa en Kursk desde gasoducto

En el distrito de Sudzha, provincia rusa de Kursk, las fuerzas militares rusas llevaron a cabo una operación que consistió en pasar cuatro días dentro de una tubería de gas abandonada para lanzar un ataque sorpresa.

La ofensiva que contó con la participación de más de 800 soldados rusos utilizó un gasoducto que suministraba gas de Rusia a Europa a través de Ucrania, y resultó en importantes pérdidas para las fuerzas ucranianas y permitió tomar el control de parte del territorio.

Soldados de diversas unidades del Ejército ruso participaron en la operación conocida como ‘Tubería’ o ‘Flujo’. Los militares rusos enfrentaron el riesgo de intoxicación y la necesidad de equipos de protección, mientras caminaban agachados durante kilómetros. Algunos de ellos grabaron videos desde el interior de la tubería.

La operación fue planeada durante más de tres semanas. El comandante de la brigada de asalto ‘Vostok’, alias ‘Zombi’, detalló que los preparativos incluyeron bombear oxígeno en la tubería y equipar las salidas a la superficie con acumuladores para el personal, así como llevar municiones, comida y agua. Además, se construyeron baños para mejorar la estancia de los soldados.

Todos caminaron más de 15 kilómetros en la tubería, entrando en pequeños grupos durante cuatro días para no revelar sus planes a la inteligencia ucraniana.

Una vez que recibieron la orden, los soldados salieron a la superficie, tomaron control de la zona industrial y comenzaron a desalojar al enemigo. Según el comandante, los militares ucranianos no esperaban dicha movilización, lo que provocó desorientación y pánico entre sus filas.