Transformación del sistema de salud significa que más de 52 millones de personas sin derechohabiencia cuenten con servicios
Uno de los objetivos más ambiciosos en la transformación del sistema sanitario es hacer realidad el derecho humano al acceso universal, a la protección de la salud, inscrito en el artículo 4º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que significa brindar servicios a más de 52 millones de personas sin derechohabiencia, aseguró el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela.
Al coordinar la sesión conjunta entre la Secretaría de Salud y la Academia Mexicana de Cirugía, Alcocer Varela señaló que es posible lograr que la atención médica esté al alcance de toda la población en todos los rincones del país, ya que la construcción del sistema sanitario actual antepone los intereses de las personas sobre los corporativos o particulares.
Indicó que para la reconfiguración del sistema de salud se invierten recursos en infraestructura física, material, medicamentos y contratación de personal, sobre todo en zonas de difícil acceso, y se impulsa la conformación de las redes integradas de servicios con la coordinación entre los tres órdenes de gobierno para evitar la duplicidad.
Acompañado por el presidente de la mesa directiva de la Academia Mexicana de Cirugía, Miguel Ángel Mercado Díaz, el secretario Alcocer Varela señaló que desde mediados del siglo XIX “sabemos que las condiciones en que nacen, crecen, viven y trabajan las personas influyen en gran medida en su estado de salud y enfermedad”.
En la actualidad, permanecen arraigadas esas condiciones sociales generadoras de enfermedad; al mismo tiempo, “enfrentamos retos que tienen que ver con el calentamiento global, la resistencia a los antibióticos, el riesgo potencial de nuevas pandemias, la carcinogénesis laboral y ambiental y el agotamiento de las reservas de agua, entre muchos otros”.
El secretario del Consejo de Salubridad General (CSG), Marcos Cantero Cortés, resaltó que con la reforma a la Ley General de Salud en 2019 se creó el Compendio Nacional de Insumos para la Salud (CNIS), que hasta esta fecha tiene registradas 15 mil 528 claves de medicamentos e insumos.
Detalló que en noviembre de 2022 se creó la comisión del compendio, con normas y reglamentos internos específicos que dan certeza y transparencia a los procesos. Asimismo, las instituciones públicas deciden los insumos que se deben agregar conforme a las comorbilidades que atienden, y cualquier solicitante puede ver en línea el avance del proceso de su trámite.
Precisó que el CNIS sustituyó al Cuadro Básico de Medicamentos, que era un esquema que contenía claves de medicamentos e insumos obsoletos, e impedía a las instituciones solicitar la inclusión de los que consideraba necesario agregar.
También se refirió a la Estrategia Nacional de Acción contra la Resistencia Antimicrobiana, como un esfuerzo y política pública que va más allá del Sistema Nacional de Salud, ya que involucra la salud ambiental y animal.
El reto es reducir o contener la resistencia antimicrobiana, “no es una carrera de 100 metros, es un maratón, un esfuerzo a largo plazo que inició y lidera el CSG, junto con el Comando Interinstitucional del Sector Salud”.
Asimismo, dio a conocer que el CSG coordina el acuerdo para la homologación de protocolos y guías de atención en todas las instituciones, siempre respetando la práctica clínica de la médica o el médico y a la persona usuaria, “sí necesitamos que absolutamente todas las personas que acuden a un servicio médico tengan derecho a la misma atención, sin importar que se atienda en IMSS-Bienestar, Issste, IMSS, en una unidad en la sierra o en un hospital de tercer nivel”, subrayó.
También recordó que, al inicio de esta administración, sólo se reconocían 20 enfermedades raras; en la actualidad, se reconocen más de cinco mil 500 padecimientos de este tipo, incorporados en la clasificación internacional de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “hoy en México no tapamos el sol con un dedo ni hacemos como que no existen las enfermedades raras”.
De igual forma, mencionó que el CSG, junto con la Dirección General de Calidad y Educación en Salud, impulsan el Modelo Único de Evaluación de la Calidad (MUEC), que es concluyente y permite verificar el cumplimiento de criterios en la atención del paciente
El MUEC consta de distintas etapas y niveles del uno al cinco, que evalúan cada unidad médica de forma gradual, para que vaya incrementando la calidad en los diferentes procesos o servicios.
Esta nueva forma de evaluación incentiva el interés de los establecimientos para participar en el MUEC, de tal forma que el número de solicitudes pasó de 100 en 2022, a 298 en 2023, y por primera vez la mayoría son unidades públicas —186 contra 112 privadas—. Del total, 218 son de primera vez y 178 prestan atención médica a personas sin derechohabiencia, principalmente en IMSS-Bienestar.
El titular de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama), Juan Manuel Quijada Gaytán, indicó que es posible controlar ciertos padecimientos mentales; no obstante, el estigma y la discriminación impiden que las personas reconozcan lo que viven y soliciten ayuda.
Precisó que la falta de comprensión e información contribuyen a la exclusión social de quienes más apoyo necesitan. Estas fisuras que surgen por comentarios discriminatorios tienen efectos evidentes en el bienestar emocional y en la sociedad en general.
El titular del Conasama dijo que, en esta transformación de la salud mental, una de las grandes luchas sigue siendo contra el estigma, por lo que es necesario avanzar en un cambio cultural profundo para impedir que la población con algún trastorno mental o usuarias de sustancias psicoactivas sean depositarias de estereotipos y prejuicios.
“Se requiere cambiar en el imaginario colectivo que son sujetos peligrosos y amenazantes; desde la Secretaría de Salud y la Conasama seguiremos trabajando con humanismo y pleno respeto a los derechos humanos”, subrayó.
El director general del IMSS-Bienestar, Alejandro Calderón Alipi, destacó el papel fundamental de esta institución en el sistema de salud mexicano. Explicó que, gracias a la Ley General de Salud, el IMSS-Bienestar fue designado como responsable de prestar servicios de salud a personas sin seguridad social en las entidades que decidieron adherirse.
Respecto al proceso de federalización, mencionó que se invierte en la contratación de personal médico, abasto de medicamentos, infraestructura y equipamiento. Dijo que se registra 43 por ciento de avance en el proceso de basificación, que se ha completado en 11 estados que forman parte del IMSS-Bienestar, al menos en la primera etapa.
En cuanto al proceso de credencialización, señaló que se han registrado 27 mil 119 personas y resaltó que este trámite no es condicionante para recibir atención médica.
Asimismo, mostró el modelo MAS-Bienestar, que será supervisado y evaluado para garantizar un sistema de salud universal, progresivo, de calidad, accesible y oportuno que asegure la prestación de servicios a toda población sin servicios médicos.